Zaragoza

Zaragoza Corruppolis

Vivo en la capital de la corrupción aragonesa, y dentro de poco tendré que remangarme los pantalones para que la mierda no los ensucie. Los doce años de marcelinato –un hombre tan limitado que necesitaba catorce asesores-, y la extraña coalición PSOE-PAR, sucedida ahora por un gobierno PAR-PP, evidencian que el PAR lo mismo sirve […]

El alarde de Belloch

Nuestro amado, y nunca bien ponderado, Alcalde de Zaragoza, no va a volver a presentarse a la reelección…, que pienso sinceramente tenía pérdida de antemano. Al parecer no recibió la preceptiva llamada con el plácet de Ferraz, y lo que realmente me extraña es que alguna vez haya gozado de la confianza de “la PSOE”, […]

Abogados del Estado y costas

Dada mi afición a litigar contra las administraciones públicas, contra el poder, en suma, he tenido ocasión de colisionar frecuentemente con los Abogados del Estado, unas veces en calidad de tales, y otras como Abogados particulares de determinadas administraciones públicas, como la Universidad de Zaragoza, por ejemplo. Situación que siempre me ha resultado absurda, por […]

Carta de un lector respecto a mi artículo sobre las autoescuelas

Don Antonio López Prieto ha tenido el detalle de enviarnos el artículo adjunto, dónde reflexiona sobre el tema de las autoescuelas, y defiende a dichas empresas, con argumentos de peso. Nada tenemos contra ese gremio, entre otras razones porque mi propio hermano y sobrino son empresarios del sector

Auto escuelas, usos y abusos

Mi hijo acaba de cumplir 18 años, y parece que es obligatorio obtener el permiso de conducción, que te permite matar legalmente, o en el peor de los casos, suicidarte. La “broma” me ha costado cara: casi dos mil euros. Y no es que el chico sea zote, ni mucho menos, pues ha aprobado a […]

¡Gracias, Aguas de Zaragoza, por avisar a los ladrones!

No me refiero a que los señores de Aguas de Zaragoza sean ladrones, aunque el pensamiento es libre, y por ahora no delinque, sino a la “moda” de poner una tarjeta de la empresa en la mitad de la puerta de nuestras casas, avisando de que no estamos en ella… Al regresar del pueblo (que […]