En España los aforados, ¿tienen licencia para delinquir?
En los últimos tiempos la realidad judicial española, la cruda realidad, nos ha demostrado la existencia de tres “clases” de ciudadanos:
De primera, que son los miembros de la Familia Real y sus adláteres.
Están por encima de la ley, pueden hacer lo que quieran y nadie se mete con ellos… No hay juez que se atreva a investigar a la Infanta Cristina, por ejemplo, y mucho menos la fiscalía, que como ya sabemos es la voz de su amo…
(Y si algún juez se atreve, siempre hay un Tribunal superior que corrige la “equivocada” decisión inicial).
De segunda, que son los aforados, ministros, diputados, senadores, etc. Muchos nos preguntamos que para qué sirve el Senado, sin darnos cuenta de que es un cementerio de elefantes muy útil para dotar de aforamiento a presuntos delincuentes políticos, que han estado gobernando en autonomías, diputaciones provinciales, grandes ayuntamientos, etc., y quieren tener la seguridad de que no tendrán que comparecer ante un juez normal y corriente, no vaya ser que “esté loco” y les empitone, es decir, les investigue.
Así tienen la seguridad de que las querellas y denuncias contra ellos sólo se verán ante la Sala Segunda del Tribunal Supremo, que ya sabemos lo comprensiva que es cuando se trata del enriquecimiento injustificado de Bono, Blanco, Ábalos…, etc.
Cualquier explicación les basta para cubrir el expediente y darle carpetazo al asunto.
De tercera, es decir ciudadanos de a pie, como usted y yo, o más bien contribuyentes natos, vasallos, súbditos… Pagadores de impuestos a troche y moche, a los que no se nos perdonará ni una, y que rápidamente seremos investigados, juzgados y condenados, previo paso por la prisión provisional, por cualquier chorrada que hagamos…
En resumen, un sistema judicial tercermundista, más propio de un país africano que de una nación europea. ¿Será verdad que África empieza en los Pirineos…?
Publicado en HispaniaMagna (25/04/2021), El Correo de España y ElCriterio (26/04/2021), PaNam Post, El Español Digital, Alerta Digital, El Diestro y Heraldo de Oregón (27/04/2021)
Así es, y a las pruebas me remito…
Todos los aforados, Bono, Ábalos, etc., se libran sin ningún problema de los procesos penales en su contra, pues la Sala Segunda del Tribunal Supremo se niega, de forma sistemática, a investigarles.
Por algo será.
Tal vez habría que empezar por investigar a los propios magistrados de esa Sala…
Y no digo más; ni menos.
1. Cada país tiene el gobierno que se merece, es decir que han votado, sobre todo en democracia o pseudodemocracia, como sucede en España.
2. También tiene el sistema judicial del que su casta política le ha dotado, y que en el caso de España, es francamente mejorable… (La casta y la «justicia»).
En España, cuando se llega a un determinado nivel, pongamos que de ministro, se puede hacer lo que se quiera, y robar a manos llenas, sin riesgos ni problema alguno…
Es triste decirlo, pero así es, y a los hechos me remito.
Los fiscales son unos mandados del gobierno de turno, y los jueces tienen miedo a jugarse su carrera, por loque todos acaban mirando para otro lado…, con tal de no ver nada.
¿Alguién lo duda…?
¿Cuántos ministros se han sentado en el banquillo de los acusados desde que vivimos en «memocracia»?
BONO, el TS se niega a investigarle.
ÁBALOS, ídem de ídem.
(Seguramente hay más casos, que ahora mismo no recuerdo).