En España abundan los hideputas (a propósito de Google y las valoraciones profesionales)
Algunos hideputas me han puesto a parir en Google, en ese recuadro que sale a la derecha, poniendo mi nombre en Internet, y accediendo a Google, y que supongo ha sido diseñado y publicado por esa empresa, pues yo nunca he contratado publicidad alguna con ellos, y no será porque no me den la tabarra periódicamente…
Casi todos los comentarios son de hace 3 semanas, “casualmente” después de mi artículo sobre la proyectada huelga feminista, contra la familia y el matrimonio, por lo que supongo proceden de ese tipo de personas, o simpatizantes suyos.
También hay alguno de hace unos dos meses, en que escribí varios artículos en contra del separatismo catalán, e incluso alguna pregunta al respecto, aprovechando la visibilidad y la plataforma publicitaria gratuita –para ellos-, que supone Google.
Como el sistema informático permite valorarte de 1 a 5, la mayoría me han valorado con lo mínimo posible, el 1, dando una penosa imagen de mí como Abogado, lo que es totalmente falso, en primer lugar porque esas personas no han sido nunca clientes míos, ni he tenido ninguna relación con ellos. Ni siquiera les conozco.
Me parece muy lamentable y penoso que personas que lean un artículo mío, un libro o hayan oído unas supuestas declaraciones en televisión, totalmente tergiversadas, y sacando palabras y frases de su contexto, desvirtuando totalmente el mensaje que pretendía
emitir, se permitan el lujo de ponerte a parir como profesional, que es precisamente con lo que te ganas la vida…
Creo es un atentado al Estado de Derecho, pues supone una intromisión falsaria en el prestigio de los demás, y estoy estudiando la viabilidad de emprender acciones legales contra Google, o contra todos y cada uno de ellos, bien por la vía civil, o incluso por la penal, ante la evidente falsedad que supone atribuirse la condición de cliente de un profesional al que no se conoce de nada, ni nunca se han solicitado u obtenido sus servicios.
Las redes sociales están totalmente desacreditadas, y en la práctica, no sirven para nada.
Bueno, sí, para dar de comer a miles de presuntos expertos en marketing, ventas on line, promoción en la red, y la Biblia en verso.
Seguimos viviendo en el país del boca a boca, señor Grau, y a mi me consta que usted ES UN PROFESIONAL COMO LA COPA DE UN PINO.
Desgraciadamente en las redes sociales abundan las mentiras…, lo que ahora llaman el postureo, o algo así.
No te puedes creer nada que no hayas visto personalmente.
De cualquier forma, dicen que lo importante es que hablen de uno…, AUNQUE SEA BIEN.
(Y sobre todo en España, donde el deporte nacional es despellejar al prójimo).
Estimado Ramiro,
Que te voy a decir yo de las opiniones sobre esta profesión que tu no sepas.
Lo lamentable es la cantidad de gente que habla de la profesión que no sabe, y la gente que puede hablar que no se atreve.
Me consta que eres un gran profesional de la abogacia y un gran conocedor del derecho (que muchas veces no van unidos).
Muchas gracias, Ramón.
Tus palabras me reconfortan mucho.
Te quedo muy agradecido. Cordiales saludos.
Estimado Ramiro, me produce mucha pena e indignacion, que la gente escriba maldades de personas a las que ni conoce, ni a visto en la vida, no lo dejes pasar por que en este mundo se necesitan personas vcalientes y no se puede permitir que te acllen, quien ha escrito lo que haya escrito, me perece una burla a personas de buena fe y cualquier cosa que emprendas por defender tu honor y tu PROFESIO)NALIDAD, sabes que cuentas cojn mi sincero apoyo, no se puede difamar, no es el primer caso, que conozco otros muchos que han sidor extorsionados
Un abrazo y ANIMO, adelante Ramiro
Un saludo
Es verdad lo que usted dice, pero luchar contra Internet, Google, etc., se asemeja mucho a la lucha de David contra Goliat…
Por no decir, que también, que la AEPD, Agencia Española de Protección de Datos, NO SIRVE PARA NADA.
Bueno, sí, para dar acomodo a un montón de enchufados del PP, empezando por su actual Directora General.
Esta muy confundido la AEPD, si que sirve y no solo para< lo que apunta, sino para sacar los cuartos a todo el que le pille de mano, que es otra forma de corrupcion
Es verdad que puedes quejarte ante la AEPD, pero sus resoluciones son recurribles ante la Audiencia Nacional, por la vía contencioso-administrativa, con lo cual al final la mayoría de los casos acaban en los Tribunales, consumiendo tiempo, dinero y mala leche de los litigantes, que tienen que pagar a abogados, procuradores, peritos, etc.
¡Y todo eso a la administración no le cuesta nada, pues litiga con los Abogados del Estado, A LOS QUE LES PAGAMOS EL SUELDO NOSOTROS!
Vamos, que hay una total y absoluta desigualdad de armas…