Vale quien sirve y servir es un honor
El sábado pasado tuve el honor de asistir al homenaje que la Organización Juvenil Española, OJE, tributó a sus mayores, a sus veteranos, a los Mandos y Oficiales Instructores de la Juventud que siguieron apoyando a la organización, cuándo ya no había nada que obtener, y sí mucho que aportar, por supuesto desinteresadamente.
Unos cuarenta años después de asistir al mítico campamento nacional de Covaleda, y a otros muchos, tuve ocasión de reencontrarme con compañeros y amigos, ya mayores, pero con el mismo espíritu de sacrificio y apoyo a los demás de siempre, que no en vano el lema de la OJE es “vale quien sirve”, al que se contesta diciendo que “servir es un honor”.
Y como nosotros decíamos, con el sarcasmo propio de los aragoneses: el que vale, vale, y el que no, a la OJE…
Quienes militamos en nuestra juventud en esa organización, y seguimos colaborando en la medida de nuestras posibilidades (en mi caso confieso el “pecado” de ayudar bien poco, más bien nada, pero aprovecho la Cuaresma para manifestar mi propósito de enmienda), sabemos perfectamente que nada malo se nos enseñó, sino mucho y bueno: a amar a nuestra Patria, España, en primer lugar, a defender la unidad e integridad de la gran nación española, a admitir en nuestra organización a todos los chicos y chicas de buena voluntad y, sobre todo, a educar con el ejemplo.
Yo soy una excepción, al menos respecto al último párrafo, pero también prometo cambiar.
Lo que es evidente es que la OJE enseñaba, y lo sigue haciendo, a ser buenas personas, a ayudar a los demás, a tener espíritu de sacrificio, a comprometernos con nuestro entorno más inmediato, familiares, amigos, camaradas, etc.
Se celebró una Misa en la magnífica Iglesia de San Fernando, del Centro Regional de Mando de Zaragoza, seguida de un posterior almuerzo almogávar en el comedor del citado Cuartel, pagado a escote, como tiene que ser, pues la OJE no vive de las subvenciones públicas, que en este país (antes llamado España, y pronto Ex España) se prodigan a asociaciones de extranjeros, gays, lesbianas, etc., pero poco o muy poco a entidades que defienden y ayudan a las personas ordinarias, que a Dios gracias somos la mayoría de la sociedad española.
Que España está enferma, que duda cabe, y que sufrimos una profunda ausencia de valores, también.
Pero que al igual que nuestro amigo y compañero don Fernando Orte Zamora está luchando heroicamente contra la enfermedad que sufre, nosotros también lo haremos para evitar que este barco, llamado España naufrague definitivamente, como quieren muchos individuos que habitan en nuestra vieja piel de toro.
¡Viva la OJE y Viva España!
Publicado en Sierra Norte Digital y La Tribuna del País Vasco (17/02/2016)
La OJE hizo, y sigue haciendo, una gran labor social.
Gracias a ella muchos jóvenes pudimos viajar por España, conocer otros lugares, amigos y compañeros, camaradas en el argot de la organización… Y, sobre todo, amar a España, nuestra Patria.
La OJE, al igual que la Sección Femenina, realizaron una gran labor de promoción y ayuda al desarrollo de la juventud española.
¡Cuántas chicas aprendieron a cocinar, a coser, a poner bien la mesa, etc., en la Sección Femenina!.
Y a comportarse en sociedad, a atender adecuadamente a sus padres o familiares enfermos, a su marido, a sus hijos.
Que diferente era aquella sociedad de la actual, dónde las niñas bien recogen la mierda de sus perros en el parque, pero sin incapaces de limpiar el culo de sus propios progenitores, que son los que les han dado la vida, y se han sacrificado -siempre- por ellas.
Creo que nunca se comprendera bien la labor que se hizo con la oge y otros xcampamentos donde sobre todo los crios de los pueblos aprendia qur habia mas mundo fuera de sus pueblos y les sirviera de otras inquietudes, que a mucho a sabido encauzar a su verdera voccaion
Francha, siempre es un placer leer tus agudos comentarios.
Yo guardo muy buenos recueros de aquella época, y me da mucha pena cuando ando por las calles y veo a los chicos y chicas jóvenes borrachos, bebiendo litronas, fumando porros y tomando otras sustancias… ¡Qué diferencias!
La OJE, al igual que el servicio militar, hacían que muchas personas del mundo rural -yo, entre otros-, vieran que había otros mundos, más allá de su caserío y su familia, les abriera la mente y ler permitiera buscarse la vida, pues se conocía a personas de procedencias e inquietudes distintas.
Recuerdo que en mi servicio militar, por ejemplo, un buen grupo de compañeros aprendieron a leer y escribir, y algunos incluso obtuvieron el graduado escolar. Otros se preparaban para ingresar en la policía nacional o la guardia civil, o se reenganchaban como Cabo 1ª. en el Ejército, pasando posteriormente a la Academia de Suboficiales.
En resumen, con muy pocos medios, y con escaso gasto, el denostado régimen anterior, hizo una gran labor social, que mucho me temo nadie hace actualmente.
GRACIAS Ramiro Llevas mucha razon la mili era algo que enseñaba mucho, sobre todo lo que apuntas y camaraderia, amistad, saber estar y saber que toda persona tiene derechos y obligaciones Yo como siempre digo hice 14 años de mili y no me fue mal jjejeje. Creo que fue un error el quitrla no hay ahora mas profesionalidad que antes que era obligatoria y te pagaban poco Eso si lo que se deberia hacer es que los soldados que tuvieran familia cobrarn el mismo salario, ue es ms o menos lo que cobran ahora los soldados voluntarios
A ver si nos podemos ver cuando termine la maldita huelga Si no es por ese dia no me hubiera enterado de que estaban de huelga Disculpa `pr haberte hecho esperar Un saludo