Rajoy es malo pero Sánchez es peor
A estas alturas de la película, después de soportarle durante casi cuatro años, la mayoría de los españoles somos conscientes de que Rajoy es un mal candidato.
Posiblemente sea un buen gerente, y a veces hasta lo dudo, pues la deuda pública no para de crecer, y la seguridad social está al borde de la quiebra, dada su tendencia a no hacer nada para afrontar los problemas, pero respecto a Gibraltar y otros temas de soberanía nacional, sólo le falta ponerse mirando para Cuenca…
El problema es que lo que viene es todavía peor.
En efecto, Pedro Sánchez, “el guaperas”, lo único que tiene de bueno es su aspecto físico, pero intelectualmente hablando es un verdadero zote, un auténtico idiota. Casi tanto como Zapatero, masón de pro, pero que según dicen las malas lenguas, pertenecía a la “rama tonta” de la masonería.
Sánchez además de alto, guapo y joven, cualidades que poseen millones de españoles, dicho sea de paso, tiene muy pocas virtudes más. Una tesis doctoral cuyo conocimiento tiene vetado, posiblemente porque es una m…, o ha sido plagiada, o escrita por un negro, o las tres cosas a la vez.
Carece de oficio y de beneficio, pues es un empleado del partido, al igual que Zapatero. Y asimismo debe de pensar que el concepto de nación es una idea discutida y discutible, vamos que no tiene ni puta idea de que es España.
Cada vez que habla dice una cosa distinta: que si una reforma para ir hacía un estado federal (cuándo nuestras autonomías tienen más competencias que las regiones de un estado federal), que si hay que dar más competencias a Cataluña, que si esto y que si aquello… Ni él mismo se aclara. Cada día dice una cosa distinta. Realmente es un analfabeto funcional.
¿Es qué no hay nadie realmente preparado en “la PSOE”, para llevar siempre al estrellato a auténticas acémilas, intelectualmente hablando? Y dicho sea con todo respeto hacia las personas, por supuesto, pues este artículo hace una crítica a las ideas políticas, no a los individuos concretos y determinados, que me merecen todos los respetos (salvo en el caso de Zapatero, y de verdad que lo siento, pero hizo tanto mal a España que soy incapaz de perdonarle).
Dice la Biblia, que por sus obras les conoceréis. Pues bien, en el caso de Pedro Sánchez, sus “obras” son las siguientes:
- Ha entregado a partidos extremistas de izquierdas varias autonomías y la gobernación de las principales ciudades españoles (con la sin par colaboración de Rajoy, que fue incapaz de cambiar la ley electoral, para que gobernase siempre el partido más votado).
- “Gracias” a su política, Bildu, un partido proetarra y separatista, gobierna en una región tan sensible como es Navarra.
- Tampoco ha tenido empacho alguno en entregar la región valenciana a los izquierdistas, o la Alcaldía de Badalona, a pesar de haber votado la población mayoritariamente al PP, a partidos de izquierdas.
- Dice que hay que dar mayores competencias a Cataluña, cuándo realmente ya las tiene prácticamente todas.
- Un día sí, y otro también, habla de un federalismo asimétrico, o de reformar la Constitución para hacer de España un estado federal. Creo que no tiene claro ni lo uno ni lo otro, ya que su formación es bastante deficiente. Seguramente es una víctima de la Lode, de la Logse y demás legislación educativa socialista, igualitaria por abajo, en la mediocridad y la ignorancia.
- Dijo en la campaña electoral de las autonómicas y municipales que nunca pactaría con Podemos, pero nada más celebrarse las elecciones, hizo justamente lo contrario.
- Dirige el PSOE de forma dictatorial, lo que augura un gobierno en idéntico sentido, si pronto tenemos la desgracia de verle en La Moncloa.
Este hombre está dispuesto a trocear España en porciones, como un queso, para darle a cada autonomía más “independencia”. No le importa quebrar la unidad nacional, con tal de llegar al poder.
Estimados lectores y amigos, ¿realmente creen ustedes que España podrá suportar cuatro años más a un segundo Zapatero, aún más lelo, si cabe, que el anterior…?
Publicado por Decisión Económica (27/11/2015) y Sierra Norte Digital (29/11/2015)
Yo también creo que lo que tenemos ahora es malo, o por lo menos mediocre…, pero lo que viene es peor.
Y como decía don Álvaro D´Ors, los experimentos, con gaseosa, que no estamos para emprender otra situación alocada como la protagonizada por ese gran subnormal llamado Zapatero…
Este Sánchez me parece el típico guapito, encantado de haberse conocido, pero que no tiene ni medio torta.
Su inconsistencia mental e intelectual es notable: tan pronto dice una cosa como la contraria.
Realmente no tiene ni medio torta, dialécticamente hablando, pues es muy flojo.
La duda que tengo es la siguiente: ¿de verdad «la PSOE», esa gran empresa, que tiene a tanta gente colocada, y no digo trabajando, pues no hacen gran cosa, no tiene a gente más preparada? Yo creo que sí.
La situación de España es extremadamente difícil, tanto internamente como en el contexto internacional, y no podemos dejarla en manos de inexpertos e impresentables, como su mujer.
¡Qué diferencia con la discreción de la señora de Rajoy, de la que casi todos desconocemos hasta como se llama!
El PSOE ha tenido un tiempo bueno, donde sus politicos metian la mano en la caja, pero al menos algo florecia de un avance, pero este es peor que zapatero y creo que para una vez ya es bastante Vi ayer parte del debate y fue lamentable No se puede ir con una miochila caraga de pura M y echarsela a otra persona en la cara. Que el PP tiene corrupcion, sí, pero el PSOE no tiene menos, por lo tanto no esta legitimado para decir lo que dijo Y si eso es grave, hay que pensar que los otros dos buitres que soklo quieren el poder por el poder y que no tiene ni pajolera idea de lo que es ESPAÑA, ni su historia, que es lo minimo que se puede pedir a unos pilitico, pues lo mejor es votar en blanco porque vamos en caida libre La verdad que siempre lohe tenido ma so menos claro, con pinza en la nariz o sin pinzas, pero esta vez lo tengo dificiol me consuelo pensando que quien podria ser una buena Presidenta es Soraya Saez de Santa Maria
Mal lo tenemos, pero Aquien votar?