Elecciones catalanas. Todos hemos perdido


Estoy profundamente dolido y apesadumbrado por el resultado. Y, sobre todo, por la imbecilidad (creo que congénita) de la mayoría de los dirigentes del PP. Acabo de oír por televisión a esa señora tan estúpida que dice ser secretaria general “de la cosa”, proclamando el triunfo del PP. ¡Un gran triunfo, de los que te llevan directamente a la desaparición! Podríamos decir la manida frase de que el PP va de victoria en victoria, hasta la derrota final…

La coalición de partidos de izquierdas, separatistas y lo que queda de Convergencia, -que no es mucho, la verdad-, han perdido las elecciones. También los partidos que podríamos llamar españoles, Ciudadanos y el PP, básicamente.
Es cierto que Ciudadanos ha crecido mucho, y es justo reconocerlo, de la misma forma que el PP ha obtenido un mal resultado, fruto de la ineptitud de la incompetente dirigente anterior, de sus comidas en “La Camarga”, o como se llamase el restaurante de las confidencias sobre la potencia sexual de uno de los hijos de Pujol, del “arreglo” bajo la mesa de la demanda contra la agencia de detectives, hurtándole a la opinión pública el conocimiento del asunto y, sobre todo, del absoluto desinterés del PP por perseguir la corrupción.

Y, porque no decirlo, de tener a su frente a un no líder, buen gerente, pero absolutamente incapaz de aglutinar ánimos y voluntades. En efecto, ¿qué se puede esperar de un registrador de la propiedad? Pues eso, que lea el Marca, fume puros, le moleste asistir al Desfile de las Fuerzas Armadas, y pase de todo…, excepto de reformar la legislación del registro civil, privatizándolo, y encomendado su gestión a los registradores de la propiedad (cuerpo al que pertenecen también dos de sus hermanos), y en suprimir el registro de la propiedad núm. 2 de Torrevieja (Alicante), que “casualmente” hacía la competencia al suyo…

Y es que don Mariano puede dar la impresión de que pasa de todo, pero sigue muy preocupado e interesado por lo suyo, como buen hombre de derechas. (O progresista de izquierdas, pero burgueses en su casa y en familia).

Rajoy lo ha fiado todo a la economía, sin querer enterarse de que hay dos derechas: una derecha económica, a la que yo no pertenezco, ni millones de españoles, y una derecha ideológica, a la que si pertenecemos los dos millones y medio de electores que hemos dejado de votar al PP, pues nos sentimos estafados: no derogación de la ley del aborto, ni de la ley de memoria histórica, seguir manteniendo chupando del bote a Aido, Pajín y otras pedorras del montón, no cambiar la ley del Consejo de Estado para echar de él a “la banda” de Zapatero, su vicepresidenta, Rodríguez Ibarra y demás no juristas, etc.

Y ahora, en el colmo de la estupidez, pretenden convencernos de que han ganado las elecciones… No se que es peor: si que piensen que somos tontos, o que ellos mismos se crean sus propias mentiras. Rajoy, María Dolores, Vice todo: quien no os conozca, que os compre.

Vosotros sois todo lo contrario a lo que tendría que ser un PP de verdad, pues no tenéis ideología alguna, como no sea la búsqueda del poder por el poder.

¿Será verdad que existe la erótica del poder…? Debe de ser cierto, pues hay que ver cuánto nos han jodido estos del PP durante los últimos cuatro años, haciendo todo lo contrario de lo que decía su programa electoral.

Y ahora les extraña que no les voten “ni los nuestros”. ¿Qué esperaban?

Pero Rajoy sigue desvariando: subida de sueldo a los funcionarios, aumento del número de empleados públicos (que son el lastre de la economía española), incremento salarial del 20% a los militares en la reserva, que no solamente no hacen nada, sino que la mayoría trabajan en el sector privado, encima haciendo una competencia desleal, en muchas ocasiones tirando los precios, pues ellos ya pueden vivir de su sueldo o pensión, etc.

Todo antes que acometer las reformas que la sociedad española demandaba y sigue pidiendo: supresión de organismos y empleados públicos, con la consecuente disminución del gasto público; reducción de muchos ayuntamientos y diputaciones provinciales, que todos sabemos que no sirven para nada; eliminación de organismos inútiles, como el Tribunal Constitucional o el Senado, por ejemplo; disminución del número de políticos “con derecho” a cobrar un salario, que encima se fijan ellos mismos, unilateralmente, y en su propio beneficio, etc.
En resumen el PP recibió un cheque en blanco de la sociedad española hace cuatro años, con la mayoría absoluta, y ha sido incapaz de cobrarlo, haciendo lo que la práctica totalidad de los españoles queríamos… ¡Y ahora les extraña haber perdido casi la mitad de escaños en Cataluña!

¿Será verdad que Rajoy no quiere ganar las elecciones…, pues sabe que el panorama que le espera en la próxima legislatura es dantesco…? Del Infierno de Dante, quiero decir: sigue la crisis, cifras similares de paro, “necesidad” de reformas las pensiones, ante la imposibilidad de pagarlas, “desaparición” del Fondo de Reserva de la Seguridad Social en 2017, por haberse gastado todo el dinero en mantener unas prestaciones económicamente insostenibles…, etc.

En resumen, todos hemos perdido: los separatistas y los que podríamos llamar nacionalistas. Y, sobre todo España, nuestra gran nación, victima de una banda de políticos sin escrúpulos, de uno y otro signo.

Publicado por Decisión Económica (01/10/2015), Heraldo Sanitario de Oregón (02/10/2015) y Sierra Norte Digital (03/10/2015).

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  1. Adolfo |